Reseña: La mazmorra de los niños - Kate Sedley.

ACERCA DEL LIBRO:

Título: La mazmorra de los niños | Título original: The Plymouth Cloak | Autora: Kate Sedley | Género: Misterio, Novela histórica | Saga: Roger Chapman | Año: 1997 | Páginas: 224 | ISBN:8401473918

Sinopsis:

Una grave responsabilidad recae en Roger Chapman: acompañar y proteger a Philip Underdown, emisario real encargado de llevar un mensaje de paz al duque de Bretaña. Chapman pronto advierte que Philip no es un grato compañero de viaje y, peor aún, allí donde va encuentra antiguos enemigos. Finalmente ocurre no inevitable, Philip aparece muerto y Chapman se convierte en el principal sospechoso...

¡Feliz inicio de semana, buhilectores!

     ¡Hola buhitos! Quería comenzar con el saludo de arriba para que todos comencemos una semana con buena actitud, y que a todos les vaya muy bien. No sé si se habrán dado cuenta de que la apariencia del blog cambió un poco en los últimos días, más concretamente, ayer. Todo comenzó porque quería cambiar algo, ya ni siquiera recuerdo qué, pero una cosa llevó a la otra y esto terminó así, espero que les guste de igual manera. Bueno, sin más dilatación, vamos a comenzar con la reseña.

Opinión personal:

Jo, jo, me ha gustado mucho leer este libro, Kate no me ha decepcionado para nada, La mazmorra de los niños continúa con el mismo ritmo, directo al punto que en la novela anterior, con misterios e intrigas por todos lados, con personajes secundarios muy buenos, los maneja de muy buena manera, te lleva a sospechar de todos a través de las páginas, si bien tuve mi sospechoso una buena parte del libro, me hizo dudar en muchas ocasiones, y bueno, que no puedo decirles quién cometió el crimen, ni si es apresado, pero que estuve en lo correcto, y a pesar de eso, me ha encantado.

Comenzamos el libro con un prólogo que nos deja un sabor de boca extraño, y con muchas dudas, se trata de una pesadilla donde Roger encuentra un cadáver a orillas de un río, Roger no tiene idea de quién se trata y espera que nunca se cumpla la pesadilla, pero él tiene la extraña facultad de "soñar el futuro".

En esta ocasión es último día de septiembre del año de nuestro señor 1473. Es la manera en que Kate Sedley nos pone en ambiente, desde los pequeños detalles, frases y contándonos un poco acerca de la condición de la Inglaterra de la edad media, siglo XV para especificar.

Y bueno, nuestro muchacho errante de veintiún años está llegando a la ciudad de Exeter cuando se topa con Timothy Plummer, que ya vimos en la entrega pasada y que es un sirviente de Su Excelencia Ricardo, Duque de Gloucester y hermano favorito del Rey Eduardo IV de Inglaterra, el cual le dice que su señor necesita hablar con Roger de inmediato.

Dios me exigía la segunda parte de la deuda que había contraído con Él al rechazar la oportunidad de convertirme en uno de sus sacerdotes. Estaba decidido a tener unas palabras con el Todopoderoso, preguntarle cuánto tiempo iba a continuar todo aquello, pero ése no era el momento ni el lugar.

El rey Eduardo IV y Ricardo quieren enviar una carta a Bretaña, con el duque Francis para que frene los intentos de Enrique Tudor de conquistar Inglaterra. En fin, que esto es una cosa de locos, hay que poner mucha atención, o al menos es lo que me pasó a mí, con los nombres y las uniones, porque es un poco loco seguirles la pista todos los que están coludidos para hacerse con el trono, o quién odia a quién. Por más que Kate lo intenta hacer simple, a veces solo son demasiadas cosas.

Ya hay un emisario escogido, Philip Underdown. Un personaje de dudosa profesión, se dedicaba al tráfico de personas por todo el canal, que ha hecho "encargos" al rey y al duque en ocasiones anteriores, del que Ricardo duda de su lealtad hacia la casa York, y que tiene enemigos hasta debajo de las piedras. Philip es un sujeto de pocas pulgas, es un hombre grande acostumbrado a trabajar solo desde hace muchos años, además, tiene un gusto peculiar por las mujeres que le ha acarreado otro tanto de enemigos.

Y ahí es donde entra Roger, Ricardo quiere que acompañe y cuide a Philip Underdown hasta que llegue a Plymouth y suba a un barco que lo llevará a Bretaña en dos días. ¿Bastante sencillo no? ¿Qué habría de complicado en cuidar a un hombre que lleva una importante carga durante dos días? Que a cada paso del camino hay peligros y personajes que quieren acabar con la vida de Philip.

Desde el principio nos encontramos con Silas Bywater, con el que Philip tiene una deuda gorda y que le da a Roger un extraño maso de flores, que según son venenosas, y que a Philip le traen recuerdos de otra vida. También está otro sujeto que es bastante misterioso, ha sí, y un par de atentados a la vida de Philip. Todo en dos días.

Cuando llegan a Plymouth, no hay barco. Y nuestros personajes son confinados a una habitación de taberna, hasta que se deciden a salir de la ciudad porque ya no soportan estar más tiempo entre cuatro paredes, y probar suerte en un pueblito que Philip conoce muy bien, pues ahí solía hacer negocios. Al final, que nuestros viajeros se quedan en la casa de unos señores que se encuentran en Londres, un poco de mentiras y otro de verdades, consiguen que Alwyn, el administrador, y Janet Overy la ama de llave consientan que se queden en la casa, sin embargo, los peligros no están lejos y Philip no deja de cosechar enemigos.

En cuanto llegan a la casa, Philip se ha fijado en Isobel Warden, a pesar de que Janet también parece interesada, una criatura preciosa de cabellos rojos y belleza sin igual, que además, está casada con el mayordomo, Edgar Warden, que es bastante celoso y no duda en dejárselo saber a Philip cuando lo encuentra con las manos en su esposa.

Mientras hablaba se proyectó una gran sombra a través de la puerta abierta y se oyó un rugido de cólera; a continuación apareció en el umbral un joven fornido, de cabello oscuro y rizado, con las manos cerradas en dos admirables puños.
-¡Soltad a mi mujer! -exclamó y, cruzando la estancia en dos zancadas, levantó a Philip del banco, lo hizo girar y lo derribó con un fuerte golpe en la mandíbula.

Hasta que la pesadilla de Roger se vuelve realidad cuando se encuentra con un cadáver a orillas de un río. Con el cráneo partido y un garrote al lado yace nada más y nada menos Philip Underdown.

Y aquí es donde la cosa se pone interesante, hay varios sospechosos, con motivos de sobra para deshacerse de este sujeto. Silas Bywater, que aparece casualmente en la casona, "Jeremy Fletcher" otro sujeto misterioso, que si Roger no se equivoca, ha atentado contra Philip anteriormente, y que también los ha seguido a través del viaje. Y luego está Edgar Warden, que su esposa probablemente tuvo una cita "secreta" con Philip y que eso derivó en su muerte.

Es cosa de Roger resolver este nuevo misterio, cuando incluso él mismo parece sospechoso, si bien a los sospechosos no les faltan motivos, hay cosas que se le pasan por alto y es hablando con Janet, quien con facilidad se ganó la confianza de Roger, que las cosas comienzan a acomodarse y así se hace una idea de quién podría estar detrás de la muerte de Philip, y cómo se las ha arreglado para cometer el crimen.

Necesitaba compartir mis preocupaciones con alguien y la señora Overy, aunque, por supuesto, más joven, me recordaba mucho a mi madre. Tenía el mismo aire de serenidad, de saber todas las respuestas de la vida[...]

Como ya he dicho, tenía a mi sospechoso número uno, y no me equivoqué, y a pesar de eso, me gustó mucho el libro, hasta podría decir que comprendí sus razones para cometer semejante crimen, pero que de todas maneras, era un asesino.

La mazmorra de los niños, una segunda entrega de Roger Chapman, con un nuevo misterio y la misma trepidante forma de llevarlo de Kate Sedley, que nos lleva por los caminos más insospechados.

Puntuación:

4/5

Muchas gracias por haber llegado hasta el final de la reseña, ahí me dicen si les ha gustado, si en algún momento podrían leer este libro, o si ya lo han leído ;)
Me encanta saber :3 Ja, no es que sea chismosa. Besitos para todos.


Adiós buhitos.