Reseña | Tenía que pasar de David Yoon.

FRANKLYN IN LOVE || DAVID YOON

Autoconclusivo | Contemporáneo | 352 páginas | 9781984812209 | 2019

SINOPSIS:

Un noviazgo real, otro ficticio y una tradición familiar que lo complica todo. ¿Qué podría salir mal?
Frank Li nació en California, nunca ha estado en Corea y casi no habla coreano. Aun así, sus padres tienen una regla de oro: solo puede llevar a casa chicas coreanas. Cuando se enamora de Brit (que no lo es) y decide fingir que sale con su amiga Joy (que sí lo es), Frank aprenderá que no sabe tanto del amor como cree ni quizá tampoco de sí mismo.

 

Opinión personal:

Como miembro de la mayoría, pertenece a todas partes. Como producto de una herencia larga y confusa, no pertenece a ninguna parte.

¡Hola buhitos! ¿Cómo les va el día de hoy? Espero que súper bien, que estén comenzando la semana con el mejor pie, increíblemente ya casi se ha acabado el primer mes del año, me parece súper curioso pero sin dudas que hay más esperanza para que sea un buen año.

Sigo trabajando en devolver comentarios, ya estoy cada vez más cerca, sobre todo porque en estos últimos meses separé más las publicaciones. También estoy muy emocionada porque ya se están emitiendo las nuevas temporadas de 911, amooo esa serie, tienen que verla si gustan de ver series de policías o bomberos, o de médicos, y bueno, vamos a la reseña de hoy.

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Tenía que pasar llegó a mí de forma curiosa porque no estaba en mi radar desde un principio, hasta que hacia finales de año estaba viendo los libritos que me faltaban para cumplir mi reto de Popsugar 2020, y me faltaba para la consigna de Una portada con solo letras, y justo en su versión en inglés solo tiene letras, así que hice un poco de trampitas pero ¿Qué sería de mí sin un poco de trampas? Ja, ja, ja.

Por cierto que es la obra debut del autor (en solitario, según tengo entendido, porque el de Todo, todo aparece como parte de sus libros), quien es esposo de Nicola Yoon, así que ahí había expectativas y reservas porque ella no me conquistó del todo... con Todo todo, pero bueno, vamos a ver qué tal me fue con este libro.

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Si tienes la voluntad de hacer algo, lo sigues y no te rindes, puedes hacer cualquier cosa. Y no hay mayor voluntad que la voluntad de amar a quien quieres.

Más curioso es cómo no esperaba gran cosa de este libro pero me ha impactado de una forma tan agradable que fue de mis libros favoritos del año 2020. Sucede que Frank Li es un chico coreano-estadounidense, está cursando su último año en la secundaria y es un genio, así que junto a su mejor amigo Q, se esfuerza para los exámenes de admisión universitaria. Eso no impide que quieran una novia, citas y enamorarse, así que cuando se da cuenta de que Brit, una chica blanca, le coquetea, comienza su estrés.

Resulta que desde hace unos años no se habla de Hanna, la hermana mayor de Frank pues sale con un chico afrodescendiente, y los Li son lo que se dice racistas. No son los únicos pues el resto de sus amigos, con quienes se reúnen una noche a la semana para cenar, y presumir seamos honestos, son coreanos, y llegan a extremos como repudiar a sus hijos, que es lo que temen Frank y Joy Song. Ella sale con un chico chino-americano, que sabe sus padres nunca van a aceptar, así que con Frank fingen estar en una relación para poder salir con sus parejas de verdad.

Entonces aquí es donde reside la trama del libro pues Frank no sabe qué hacer, ya de por sí tiene la presión de la universidad; está la parte del primer amor, lo cual es emocionante pero da miedo, y su amistad con Joy que se me hace muy divertida de ver porque se comprenden muy bien. La situación con sus padres, que es lo que más me gustó de esta historia porque conocemos mucho de la cultura Coreana, y me encantó porque siempre me ha gustado conocer otras realidades, y el racismo de sus padres, lo que me gustó por cómo se tocó el tema.

Los blancos pueden describirse a sí mismos con solo estadounidenses. Solo cuando se les presiona, entran en su herencia étnica. No parece justo que tenga que explicar para siempre mi historia de origen con ese guión silencioso, mientras que los blancos no lo hacen. Es complicado. Pero simple. Simplificado.

No porque el racismo esté bien, eso nunca va a estar bien, nunca me va a gustar leer que sucede, por ello que este tipo de historias son tan necesarias, necesitamos mucha más educación, más información; sino porque no se me habría ocurrido que una minoría sería racista a otras razas, culturas, etc, hasta a los mexicanos nos toca ja, ja, ja. Los Li tienen una tienda en una zona pobre, y uno de sus trabajadores es un mexicano expresidiario, el papá hace comentarios a que es buena persona porque no ha robado nada y cosas así que hacen enojar a Frank, y a mí.

Por otro lado los papás y Frank son de culturas diferentes, ellos nacieron en Corea, mientras que Frank ya nació en EUA, por lo que la cosa no podía ser más distinta, además hay una barrera de idioma que dificulta las cosas, ellos hablan un inglés muy básico, y Frank no habla nada de coreano. Intenté comprender a los papás porque otra época, y ellos siempre creen saber qué es lo mejor para sus hijos, pero me desespera que no abren su mente a su nuevo ambiente. Por cierto que lloré con este libro, lo que no esperaba para nada.

Tengo que hablarles del romance porque es parte importante del libro, Frank sale con Brit, me agradó la pareja que hacen porque son chicos divertidos, sin embargo sobre ellos está esta sombra de que él no la presenta a sus padres como su novia, mientras lo empujan hacia Joy. Por otro lado tenemos la relación falsa con Joy, es una chica genio bastante divertida con la que tiene mucho en común, como salir con alguien que sus padres no aprobarían, ya que Joy sale con Wu, este es un chico deportista cachas un poco más serio pero buen chico, aunque vemos menos de esta pareja.

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Porque el amor es más aterrador que cualquier otra cosa. El amor es una poderosa mano azul que viene directamente hacia ti desde el cielo. Todo lo que puede hacer es entregarse y rezar para no caer a la muerte.

Ahora les hablaré de los personajes, Frank Li, diecisiete años, cabellos oscuros y ojos cafés, es un chico bastante listo que no sabe comunicarse con sus padres, no solo por el idioma sino por sus ideas, con su racismo, aunque pase bastante corajes, a la vez que extraña a su hermana con quien habla poco. Me daba mucha ternura y pena cómo tenía que encajar todos los aspectos de su vida, lidiar con sus papás a los que ama y respeta pero que le desesperan, entiendo mucho esa parte, que le guste una persona que no aprueban y tener que recurrir al engaño para sobrevivir.

William Lee, Q para los amigos, dieciocho años, es afroamericano, cabellos y ojos oscuros, también es un genio y es el mejor amigo de nuestro protagonista, lo comprende bastante bien e intenta lidiar con su propio enamoramiento. Me agradó mucho este chico porque es un gran amigo, su familia es muy genial. Brit Means, diecisiete años, cabellos rubios y ojos azules, es una genio también, es una chica muy abierta y cariñosa. Esta es otra realidad que me agradó mucho conocer porque sus padres son súper frescos, y la hacen a ella una chica muy abierta y divertida.

Joy Song, diecisiete años, cabellos negros con mechones de color y ojos oscuros, es una genio interesada en el espacio, también vive con el terror de que sus padres se enteren de que sale con un chico chino-estadounidense, así que no le cuesta mucho trabajo caer en el plan de fingir salir con Frank. Los Li, ambos son personas que sufrieron mucho en Corea así que Estados Unidos es un paraíso para ellos, quieren mucho a sus hijos, aunque considero que su cultura no les permite expresarlo, así que trabajan duro para darles lo mejor.

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He disfrutado mucho de Tenía que pasar, comenzando porque el autor tiene una pluma muy ligera y divertida, de veras que me reí y sentí mucho lo que sucedía, hasta lloré. La magia de los capítulos cortos vuelve a atacar, realmente se pasa en nada, como que te atrapa bastante la historia de este chico, su primer amor, el racismo de sus padres y cómo él se siente inadecuado, sin saber si es de acá o de allá, si está haciendo lo correcto al desafiar a sus padres por algo que quiere, pero siguen siendo sus padres y los quiere. No sé, como que hay muchos elementos que me gustaron.

Los blancos, los negros, los indios, los jamaicanos, los mexicanos y los de cualquier sitio comen cosas raras que están riquísimas.

Tenía que pasar es un libro contemporáneo donde un chico se debate entre el deber y lo que quiere hacer, por un lado sus padres le dicen que salga con una chica de su misma nacionalidad, por otro lado se ha enamorado de una chica blanca, entonces finge salir con una de sus amigas para mantener la paz, pero está lidiando con demasiadas cosas y algo debe pasar.

Me ha gustado mucho el libro, desde leer a este autor con una pluma bien ligera, donde me identifico con los personajes, hasta la trama del racismo donde me dolía la carga que tenía este chico con lo que quería hacer y lo que le pedían que hiciera, además de otras tramas que no veía venir, e hicieron una lectura muy completa.

5/5 LO AMÉ.

Entonces esta es la reseña del día de hoy, espero que les haya gustado, yo ya les he comentado que es un libro que me gustó muchísimo, es de mis favoritos del año pasado, también es el favorito del mes pasado, y bueno, fue una sorpresa ja, ja, ja, ya me dirán si habían escuchado de este libro, si les ha dado curiosidad, no sé, lo que gusten comentar que los estaré leyendo, y aunque tarde pero devuelvo comentarios ja, ja, ja.

¡Que tengan una gran semana! 🎡

Adiós buhitos.