Reseña | Sed de Neal Shusterman, Jarrod Shusterman.

DRY || NEAL SHUSTERMAN, JARROD SHUSTERMAN

Autoconclusivo | Cli-fi | 418 páginas | 9788416858897 | 2018

SINOPSIS:

¿Hasta dónde llegarías para conseguir la última gota de agua?
Alyssa vive con su familia al sur de California, en un barrio residencial muy apacible... Hasta que, un día, del fregadero deja de salir agua. Tras padecer varios años de sequía, eso tampoco es extraño; allí todo el mundo está acostumbrado a las advertencias: no riegues el césped, no llenes la piscina, no te des duchas largas.
Pero esta vez ya no queda agua que ahorrar.
En cuestión de unas horas, el apacible barrio residencial se ha llenado de familias desesperadas y dispuestas a todo con tal de conseguir un bidón de agua. Y cuando sus padres no regresan, Alyssa, su hermano y el peculiar vecino que los acompaña no tienen más remedio que empezar a tomar decisiones difíciles para sobrevivir. Cueste lo que cueste.

Opinión personal:

...entiendo que, cuando los humanos creen que su vida corre peligro, recurren a cualquier opción a su alcance. Si no quieres que sea a tu costa, lo mejor es quitarte de en medio.

¡Hola buhitos! ¿Cómo están el día de hoy? Espero que súper bien, que estén comenzando la semana por todo lo alto, yo por mi parte muy bien, con toda la intención de echarle ganas a la tesis porque se va atrasando ja, ja, ja, y también estoy mega tentada a volverme a ver Merlí, todo porque una colega se la está viendo y me encanta, en fin, que veremos. Ahora los dejo con la reseña de hoy.

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Creo que he visto este libro cuando el año pasado salió pero nunca me había animado con el autor así que lo tenía ahí, hasta que este año en uno de los retos que estoy haciendo (Retos 2019), ha salido de leer un cli-fi, yo no tenía idea de qué era eso pero es ciencia ficción mezclado con cambio climático y este me sonaba en ello así que de que lo leía este año, lo leía.

Peeero las chicas de Oasis literario lo han puesto en una terna y ha salido, así que ya lo hemos leído en compañía. Ahora veamos qué tal ha ido, como otra nota, pues lo hemos leído casi al tiempo que se dieron las conferencias por el cambio climático en la ONU ¿Coincidencia? No lo creo, ja, ja, ja, no, yo creo que sí fue pero también es un reflejo del momento que estamos viviendo, de poner los focos en esta situación, vamos a ello.

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No hay imágenes de radar que cubran una crisis hídrica.
No hay marejadas ciclónicas, no hay campos de escombros… La restricción es tan silenciosa como un cáncer. No hay nada que ver, así que en las noticias lo tratan como una nota a pie de página.

Sed nos lleva California, EEUU con Alyssa y su barrio residencial. La sequía lleva años en la región y las alertas no son extrañas: no se riega el césped, las albercas no se llenan y las duchas deben ser cortas; pero ha llegado el día en que el agua ya no cae del grifo, ya no hay agua para ahorrar, y la apacible comunidad se vuelve patas arriba por conseguir la última gota de agua.

Cuando los padres de Alyssa no regresan de donde fueron a por agua, ella, su hermano y su curioso vecino tendrán que tomar medidas extremas para sobrevivir. Cuando las personas están al borde de perder la cordura los límites morales comienzan a desdibujarse, ya solo importas tú y lo que harás por tener la última gota de agua.

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Las personas que hemos abierto una llave y visto caer unas tristes gotas comprendemos cómo se sintió la mamá de Alyssa cuando el agua se agotó, y es algo que vive muchísima gente alrededor del mundo, sucedió en Ciudad del cabo, Sudáfrica a inicios del año pasado cuando se les estaba acabando el agua, nosotros vinimos a enterarnos ―quizás algunos ni se hayan enterado―, cuando la situación era crítica y se acercaba el Día cero, cuando habría un corte general, y es parte de lo que vemo
s en Sed.

Aquí no es un país africano, es Estados Unidos, es California y se han quedado sin agua, todos los ojos del mundo están al otro lado de la costa del país donde hay un huracán, y las cosas se pondrán muy mal antes de que alguien se de cuenta. Entonces el libro toca esta parte del cambio climático, de las altas temperaturas, de los incendios forestales, de la escasez de agua pero desde la perspectiva humana.

¿A qué me refiero con eso? Pues que la naturaleza humana es imprevisible en el mejor de los casos, y en una situación extrema el ser humano es fascinante porque no sabemos cómo vamos a reaccionar, qué haremos en determinada situación, ni si tendremos límites morales si está en juego la supervivencia. Y es justo lo que nos da este libro, la perspectiva de algunos personajes, con personalidades muy variopintas, en una situación extrema, el cómo reaccionan, y por supuesto, quién va a sobrevivir.

De golpe, el mundo seguro y cuerdo que conocía está lleno de incógnitas aterradoras. Por tanto, ¿qué es peor? ¿Esas incógnitas o la chica rara que nos acaba de salvar la vida?

Entonces que este libro me encantara mucho porque tiene una trama que no había leído antes, casi siempre que me encuentro con libros apocalípticos son sobre enfermedades, zombies, guerras y demás, pero en esta ocasión no, toca algo tan simple como el agua, que la mayoría no tememos que no esté. Por supuesto que también influye mucho la pluma de los autores porque han sabido mantener la tensión y que las cosas resultaras realistas, me agradó que intercalaran narración, y metieran pequeños fragmentos en tercera persona de situaciones alrededor.

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Ahora voy con los personajes de Sed, algunos tienen narración, otros solo están alrededor. Alyssa Morrow tiene diecisiete años, una chica común y corriente con alto grado de moralidad, a veces me agradaba, a veces no tanto. Garret Morrow tiene diez años, un niño un tanto bobo que vive en la seguridad de la infancia, por lo que quise pegarle en muchas ocasiones ja, ja, pero en otras es un chico bastante inteligente.

Kelton McCracken de diecisiete años, su familia siempre está preparada para lo peor, como un apocalipsis así que él sabe toda la teoría para sobrevivir; me agradó en más ocasiones que no. Jacqui Costa de diecinueve años, una chica ruda muy inteligente que aparece más adelante, me agradó bastante por lo que no se ve.

Henry es un chico misterioso que me desesperaba y me daba risa a la vez, siempre está pensando en estadísticas para sobrevivir. Entonces ellos son los personajes y narradores principales, de ahí aparecen los Morrow, los McCracken, el resto de los vecinos, compañeros de clase y más personas de la comunidad que están en medio de todo esto, algunos tienen un papel más importante pero los dejó hasta ahí.

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El final, es que me ha gustado pero a la vez me ha dejado un sinsabor, como que empezaron a cerrar cosas apresuradamente y al final es como que todo me lo dicen en unas cuantas páginas, no sé si me doy a entender pero sí, fue donde tuvo detallitos, en mi opinión.

Es como que te sales de tu forma de ser habitual… y te sientes diferente. Te comportas de un modo distinto. Entonces, ¿qué sucede cuando no eres más que otra alma sedienta en un mar de zombis del agua? Te conviertes en uno.

Sed es un libro de cli-fi donde una comunidad se ha quedado sin agua y un grupo de jóvenes tendrán que tomar medidas drásticas por sobrevivir cuando todo se pone de cabeza alrededor suyo por obtener la última gota de agua.

Me agradó el enfoque de la trama, hacia el cambio climático y la situación tan extrema pero sobretodo hacia la naturaleza humana, hasta dónde podemos llegar por sobrevivir, obviando nuestra propia moralidad o poniendo a los demás antes que a nosotros.

4.5/5 ME ENCANTÓ.

Entonces buhitos, esta es la reseña del día e hoy, espero que les haya gustado, a mí me agradó hacer la reseña, se que no les cuento mucho de las situaciones que viven los personajes, me centré más en el mensaje, y bueno, espero les gustara, eh, ya me dirán si conocían el libro, si se les antoja y qué otro libro me recomiendo de los autores, los leo.

¡Que tengan un gran día! 🚿

Adiós buhitos.